Unidad de Investigación

Exterior U.I.G. (Factory - CrackBag)

La Unidad de Investigación de Genoma, más conocida por sus siglas U.I.G. es un amplio grupo de edificios de ruinosa apariencia situados en la frontera occidental del Núcleo 243, junto al muro tecnológico que genera su escudo protector.

Exteriormente dicha unidad de laboratorios aparenta ser un conjunto de fábricas viejas, oxidadas y sin utilidad; y es en parte gracias a esta característica que la población civil nunca ha llegado a indagar sobre este complejo, inducidos a pensar que sólo se trata de un lugar abandonado y quizás repleto de peligrosos criminales abrigados en su oscuridad.

Pero nada más lejos de la realidad, pues en el interior de este amplio complejo existen más de 15 laboratorios en funcionamiento e incluso más de 200 científicos, llevando a cabo toda una serie de macabros experimentos desde hace años.

Pocos conocen la verdadera naturaleza de este lugar y, en su mayoría, los conocedores son

híbridos que alguna vez estuvieron allí y lograron escapar, o bien familiares de gente desaparecida en las cercanías.

Fundación de la Unidad

Antiguas cámaras (Concept Lab - Alexmartinez)

Tras la aparición de los híbridos después de la Gran Guerra la población los temió y cargó contra ellos, promovidos por la histeria social. Mientras el mundo se comenzaba a dividir, la comunidad científica vio en estos nuevos seres un nuevo horizonte para la investigación.

Con motivo de investigar la repentina aparición de los híbridos y su hipotético origen, en el año 2072 se fundó en Núcleo 243 toda una serie de laboratorios con la mejor tecnología en los que se reunió a los mejores médicos y científicos del momento. A este complejo se le bautizó como Unidad de Investigación del Genoma y fue presidida por su benigno y altruista fundador: Klaus Lukkaerth.

Multitud de avances se lograron en el interior de estos laboratorios, como el desciframiento de las cadenas de ADN de multitud de clases de híbridos y, gracias a esto, la capacidad de modificarlo para mejorar la calidad de aquellos híbridos que habían nacido con malformaciones, errores genéticos o discapacidades a causa de la mezcolanza de bases genéticas. Pero la realidad social del momento impidió que este complejo de estudio conociese el mundo exterior y se instó a todos sus científicos y trabajadores a mantener en secreto su existencia, ya que la población mundial condenaría que se experimentara para mejorar la vida de los híbridos, seres que estaban mal vistos y que para muchos no debían haberse originado nunca.

Durante largos años la Unidad de Investigación continuó con su trabajo, extendiendo su competencia hasta asuntos más allá de la investigación, como la labor de acoger híbridos repudiados por sus familias o híbridos pobres o callejeros que, en algunos casos. incluso acababan siendo adoptados por científicos del lugar como sus propios hijos, decididos a protegerlos.

Así pues, la Unidad nació como un proyecto altruista, filántropo y gentil, en manos de un director y dueño que deseaba que el ruinoso y apocalíptico mundo que la guerra había generado, aceptara a los nuevos habitantes como iguales, de modo similar a como en el siglo XX se luchó por la igualdad de raza.

Cambio de poder y rumbo

Pocos años tras su fundación, nació el primogénito de Klaus Lukkaerth, al que llamaron James. Para la sorpresa de Klaus y su madre, James había nacido como híbrido, hecho que no fue un obstáculo para sus padres, que lo criaron y cuidaron de la forma más humana posible.

Sin embargo, James Lukkaerth fue duramente influenciado por la sociedad durante su adolescencia y juventud, muchos grupos radicales de la época arremetieron contra él y, poco a poco y sin sus padres darse cuenta, James se convirtió en una persona reprimida y con un odio irracional hacia los híbridos que turbó su mente.

En el año 2101, el fundador de la Unidad falleció y James Lukkaerth, su hijo, tomó el mando relevándolo como el nuevo presidente. Para entonces, la Unidad llevaba 29 años en funcionamiento, James contaba ya con 23 años y su mentalidad ya se encontraba muy distorsionada.

Fue a causa de su odio latente y degeneración que produjo radicales cambios en los laboratorios de su difunto padre. Contempló un nuevo horizonte para los experimentos, que pasaron de tener una intención benigna, a ser un completo despropósito inmoral y en contra de toda ética: a partir de entonces, U.I.G. se encargaría de realizar experimentos oscuros e inhumanos, tales como la total mutación de híbridos  experimentos con operaciones de toda clase, carentes de anestesia; pruebas de fusión o todas las mutilaciones habidas y por haber.

Puesto que los científicos que su padre contrató se mostraron reticentes y contrarios a estas nuevas prácticas, fueron encerrados en la unidad, sometidos a similares torturas, pues James Lukkaerth temió que pudiesen revelar al mundo la existencia de los laboratorios y truncar su funcionamiento.

La Unidad en la actualidad

Futuros sujetos de investigación (Lab - Acidprice)

En la actualidad del foro, el año 2125, la Unidad de Investigación de Genoma prosigue con su misión y sigue estando encabezada por J. Lukkaerth. Sin embargo, destaca que sus experimentos, al cabo de los años, se han recrudecido, volviéndose más enrevesados y completamente desproporcionados. Puesto que con el tiempo los híbridos que se hospedaban en la Unidad murieron a causa de las prácticas, James vio la necesidad de conseguir nuevos, produciéndose de esta manera toda clase de desapariciones en la ciudad de híbridos de todas las edades, alarmando a esta minoría. La Unidad sigue siendo desconocida para el mundo, pero varias personas lograron escapar de sus garras, y es gracias a esto que en el exterior es conocida por unos pocos híbridos y antiguos trabajadores.

 

Los 15 laboratorios iniciales, además, fueron expandidos hasta llegar a los 32. La Unidad fue expandida creando los nuevos en el subsuelo, en oscuros y amplios sótanos que se asemejan más a sucias morgues que a lo que alguna vez debieron ser.

Creación de los Arubachi

Entre los experimentos que allí se hacen, se encuentra el de conseguir crear nuevas especies de híbridos en pos de jugar a ser dioses. Cientos son los proyectos fallidos que se han generado con esta idea, sin embargo, entre todos, uno tuvo éxito: los Arubachi, seres humanos cuyo ADN se combinó artificialmente con el de algunas clases de insectos.

 

Tras el nacimiento de los primeros Arubachi en el laboratorio y el sometimiento de los mismos a experimentos que pretendían constatar la fortaleza y resistencia de su físico y mente, algunos consiguieron huir, ocultándose en los suburbios del Núcleo 243. Los Arubachi nacieron fértiles, y gracias a esto, aquellos que viven en relativa libertad en la ciudad, han logrado descendencia, en algunos casos prolongando la existencia de la subespecie.

 

Mientras tanto, gran cantidad de Arubachi permanecen encerrados en la U.I.G. sometidos a pruebas ya mencionadas.

TRIVIA

• Lowan Blake, alcalde de Núcleo 243 desconoce totalmente la existencia de la Unidad de Investigación.
• Algunos científicos lograron escapar, sin embargo, actualmente son perseguidos y amenazados.
• Multitud de monstruos han sido creados por U.I.G. tras la mutación total de algunos híbridos.